EL SECRETO DE LA MONA LISA

Si nos preguntamos cuál es la pintura más famosa de la historia, podemos contestar con seguridad que es “La Gioconda”, más conocida como Mona Lisa, pintada por Leonardo da Vinci. Esta pintura actualmente se encuentra en el Museo de Louvre, en Paris.

Leonardo mismo sabía que esa pintura era especial, quizá la más importante entre todas las que había pintado; tanto que cuando ya mayor fue a trabajar a Francia a trabajar protegido por el Rey Francisco I, la llevó consigo, a pesar de que era un encargo que debía terminar, pues llevaba más de cuatro años trabajando en ella.

Una muestra del rostro del más
grande pintor de la historia.

A pesar  de todo esto, poco sabemos de la mujer retratada. Se cree que el nombre con el que conocemos esta obra proviene del encargo que le hizo a Leonardo un rico comerciante de Florencia, para que pintara a su esposa. Este comerciante se llamaba Bartolomeo de Zanobi del Giocondo, y su esposa se llamaba Lisa. Por está razón se le conoce como Gioconda, es decir, la mujer del Giocondo, o bien, como Mona Lisa, ya que mona significaba dama o señora. Entonces su traducción podría ser la señora Lisa.

Algunos creen que Leonardo comenzó a pintarla hacia 1503, pero otros piensan que fue hacia 1513 y que como no estaba terminada, se la llevo a Francia. A través de los escritores contemporáneos de Leonardo, sabemos que él era un hombre guapo. Su atractivo sorprendía a muchos, pero a éste se sumaba que era gracioso y amable; su conversación era entretenida, elocuente y sabia. Por eso, a todos les encantaba escucharlo. Además, sabía de música, tocaba la lira y cantaba maravillosamente. Dicen que sólo tenía un defecto (si así podemos llamarlo): que cultivaba tal cantidad de intereses que apenas empezaba un trabajo, lo abandonaba rápidamente para dedicarse a otro con todo entusiasmo.

Todos los que en esa época vieron esta pintura se dieron cuenta que había cosas en este cuadro; por ejemplo, tenia una luz misteriosa. Además de que Leonardo creó un misterioso paisaje con bruma y con montañas rocosas y ríos que apenas distinguimos. Por otra parte cabe señalar la postura de la mujer era nueva, ni de perfil ni completamente de frente. Pero sobre todo llama la atención los ojos y la sonrisa de la dama, tanto que aún tratamos de saber porqué es especial…

La mona lisa, una gran pintura que hasta ahora
sigue siendo tema de conversación.

A través del retrato de la Mona Lisa, podemos aprender muchas cosas de esa época. La ropa de la dama retratada, aunque elegante, es extremadamente sencilla. El brazo izquierdo de la modelo descansa sobre el apoyo de la silla en total reposo, mientras parece que el derecho acaba de colocarse sobre él con un ligero movimiento. Su cara y su pecho están iluminados de manera que parecen adquirir volumen, dando así la impresión de que la mujer del retrato está viva.

Los ojos nos miran del lado, parece que nos dicen algo, que saben algo de nosotros, o que ella sabe que nosotros sabemos de ella; es una mirada de mutuo entendimiento, entre ella y el espectador.

Sus ojos hacen eco con su boca, la cual apenas se levanta por las comisuras de sus labios. Ahí está su gran secreto, el que todos quieren indagar: ¿es una sonrisa de melancolía? ¿De burla? ¿De una serena alegría?... entre muchas otras. Con esto confirmamos que Leonardo logró que la Mona Lisa tuviera una y mil expresiones. Además de que expreso una de sus ideas centrales era que todo en la naturaleza cambia, lo que existe en un instante puede dejar de serlo en el siguiente, y justamente éste es el secreto de la vida.

Por otra parte hasta ahora han surgido libros, ensayos, películas, entre otras, que mencionan lass incognitas en las pinturas de Da Vinci, para mi parecer la película más famosa el codigo Da Vinci... que tal vez no sea del todo real, pero narra una historia muy buena, aqui te dejo con una probadita de lo que es.